En un video que comenzó a circular en la red social YouTube, el llamado Cártel Jalisco Nueva Generación exhibe a cuatro presuntos secuestradores de Ameca que operaban en la región Norte Valles de Jalisco.
Los sujetos confiesan haber sido los autores del secuestro de Evelia Castro, hermana de un general del ejército y también del señor Juan Manuel González Bernal, a quien mataron junto con su pequeño hijo, no obstante a que la familia ya les había pagado un millón de pesos por el rescate.
En el video, que es retomado por el columnista por ser de interés público, se puede apreciar el interrogatorio que le hace uno de los miembros del Cartel Jalisco Nueva Generación a los cuatro presuntos plagiarios. Los tres primeros afirman trabajar por órdenes de “El Cisne”, que es el sujeto de la derecha, quien a su vez soltó información que involucra a un tal señor Moreño de Sinaloa, quien es al que rinden cuentas de los secuestros.
Uno de los pistoleros señala que estas personas son autores intelectuales de varios secuestros, entre otros de la hermana del general Castro, del 32 Batallón, al igual que a un ciudadano que junto con su hijo mataron no obstante cobrar el rescate.
El primero en ser presentado es quien dijo llamarse Guadalupe Daniel Castillón alias El Chispas; en cámara asegura que su trabajo era desmantelar los autos de las personas secuestradas y ayudaba a eliminar los cuerpos, quemándolos para no quedar evidencia, todo por órdenes de “El Cisne”, y lo señala.
Después sigue Edgar Díaz, alias El Pigüi. Esta persona manifiesta que su labor era llevarle comida a sus compañeros y ayudar en lo que se necesitara.
En seguida interrogan a Saúl Roberto Topete Santiago, él era quien “levantaba” a las personas y afirma haber participado en el secuestro de Delia de Ameca, por la que pidió cuatro millones de pesos, pero que al final sólo le dieron 400 mil pesos y que la dejaron ir porque se enteraron que era una señora “muy peligrosa”.
Por último piden que hable Miguel Díaz Rubio (a) El Cisne, cuyo trabajo –externa—era recibir y darle información al señor Moreño de Sinaloa, y que los datos (quizá para secuestrar) los recibía de un tal King y de su esposa.
Al regresar al primero de los interrogados, éste sostiene que Juan Manuel González Bernal y su hijo murieron de hambre, que pidieron dos millones de pesos por dejarlos libres, pero que sólo recibieron un millón de pesos porque ya no pudieron entregarlos a sus familiares, ya habían fallecido.