A través de un video publicado en su canal de YouTube, el ex edil de Tepalcatepec, Guillermo Valencia denuncia que el penal donde se encuentra recluido el ex líder de las autodefensas, Manuel Mireles, es una cárcel de exterminio y de segregación social.
En la grabación, con duración de poco más de 12 minutos, declara que el penal número 11 de Hermosillo, Sonora ha sido calificado como "una cárcel de exterminio, de segregación social, especializada en la tortura y que facilita el aislamiento, la tortura física y psicológica".
Guillermo Valencia asegura que la inserción del doctor Manuel Mireles a dicho penal "no fue una casualidad, fue algo premeditado, fríamente calculado por alguien perverso y maquiavélico como Alfredo Castillo".
El ex edil asevera que el Comisionado Castillo es un melómano porque no se cansa de mentir, esto, debido a declaraciones que el funcionario realizó sobre que desconocía si el corte de cabello y bigote que le hicieron a Mireles eran reglas específicas del penal a lo que Valencia responde que "cualquier abogado sabe que en un penal federal es parte de los manuales de seguridad y del reglamento cortar el cabello y bigote, el asunto está en que no aplican esa ley a los capos como "El Chapo", a quien no le cortaron el bigote ni el cabello, ni al Z-40 y a varios criminales porque les tienen miedo, pero al doctor Mireles, como es un simple luchador social y no le tienen miedo, con él se ensañan y quieren dar una muestra de alarde de poder".
Durante su denuncia, el ex edil menciona una publicación de El Universal hecha el 23 de octubre de 2013 sobre las condiciones e irregularidades del el penal número 11 de Hermosillo, Sonora.
En la publicación, se da a conocer que pese una investigación de la CNDH revela que pese a los elevados costos del penal, las deficiencias del penal número 11 son más graves que las encontradas en otras cárceles de la República Mexicana sin capital privado ya que existen traslados irregulares de reos, incomunicación, encierro prolongado en celdas, inexistencia de clasificación de reos, deficiente alimentación, servicios de salud de mala calidad, falta de capacitación para el trabajo, actividades deportivas, culturales y recreativas, así como personal insuficiente.
En la grabación, con duración de poco más de 12 minutos, declara que el penal número 11 de Hermosillo, Sonora ha sido calificado como "una cárcel de exterminio, de segregación social, especializada en la tortura y que facilita el aislamiento, la tortura física y psicológica".
Guillermo Valencia asegura que la inserción del doctor Manuel Mireles a dicho penal "no fue una casualidad, fue algo premeditado, fríamente calculado por alguien perverso y maquiavélico como Alfredo Castillo".
El ex edil asevera que el Comisionado Castillo es un melómano porque no se cansa de mentir, esto, debido a declaraciones que el funcionario realizó sobre que desconocía si el corte de cabello y bigote que le hicieron a Mireles eran reglas específicas del penal a lo que Valencia responde que "cualquier abogado sabe que en un penal federal es parte de los manuales de seguridad y del reglamento cortar el cabello y bigote, el asunto está en que no aplican esa ley a los capos como "El Chapo", a quien no le cortaron el bigote ni el cabello, ni al Z-40 y a varios criminales porque les tienen miedo, pero al doctor Mireles, como es un simple luchador social y no le tienen miedo, con él se ensañan y quieren dar una muestra de alarde de poder".
Durante su denuncia, el ex edil menciona una publicación de El Universal hecha el 23 de octubre de 2013 sobre las condiciones e irregularidades del el penal número 11 de Hermosillo, Sonora.
En la publicación, se da a conocer que pese una investigación de la CNDH revela que pese a los elevados costos del penal, las deficiencias del penal número 11 son más graves que las encontradas en otras cárceles de la República Mexicana sin capital privado ya que existen traslados irregulares de reos, incomunicación, encierro prolongado en celdas, inexistencia de clasificación de reos, deficiente alimentación, servicios de salud de mala calidad, falta de capacitación para el trabajo, actividades deportivas, culturales y recreativas, así como personal insuficiente.