Un sujeto que saqueaba la casa donde fue capturado Fernando Sánchez Arellano, El Ingeniero, cabecilla del otrora poderoso cártel de sus tíos, los hermanos Arellano Félix, fue detenido en posesión de la lavadora y otros objetos propiedad del capo.
Jesús Ariel Beltrán Amézquita —al igual que otros cómplices, los cuales se llevaron la secadora y otros objetos— se dedicaba a saquear la casa que Sánchez Arellano ocupó en el populoso fraccionamiento Ceceña, de esta frontera, hasta el pasado 23 de junio, cuando El Ingeniero fue detenido mientras festejaba el resultado del juego México-Brasil del Mundial de Futbol.
Beltrán Amézquita, de 29 años, confesó que otros artículos, como una secadora, ya habían sido sustraídos del interior del inmueble por su cómplice.
El sujeto fue detenido en posesión de diversas herramientas que portaba en una mochila, así como con la lavadora la cual se encontraba instalada en la casa ubicada en la esquina de las calles Dolores y Alicia María.
El inmueble presentaba los sellos rotos de la Procuraduría General de la República (PGR), específicamente de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), los cuales fueron colocados días después de la captura de Sánchez Arellano, el pasado 23 de junio.
Éste es apenas uno de los casos de las propiedades de narcotraficantes que han sido saqueadas tras la captura de sus dueños. Se trata de mansiones de las zonas residenciales de esta frontera, como la colonia Juárez o el fraccionamiento El Paraíso.
Esta última propiedad a lo largo de 15 años ha sido vandalizada, saqueada, ocupada por soldados, que derribaron el portón a bazucazos, confiscada y devuelta a sus propietarios; hoy se encuentra a la venta mediante un número de teléfono celular en el que nadie contesta.
En el caso de la casa donde vivía el sobrino de los Arellano, hasta junio pasado cabeza de ese cártel, los saqueadores entraron sin importarles romper los sellos de la PGR.
A diferencia de las casonas donde vivían los cabecillas del crimen organizado hasta hace pocos años, las propiedades que ocupan hoy en día son más modestas. Ya no tienen el esplendor de antaño, y hasta se ubican en colonias más populares donde buscan pasar inadvertidos.
El mismo domicilio había sido rentado en años pasados por el exalcalde Jorge Ramos, quien se dijo sorprendido de que en dicha propiedad haya sido capturado uno de los narcotraficantes más buscados de esta frontera.
De acuerdo con la actual legislación, la propiedad podría ser incautada a su legítimo propietario, por haber sido alquilada a un narcotraficante.