El Departamento del Tesoro de Estados Unidos incorporó a dos ciudadanos y a una empresa de seguridad privada mexicanos en la lista de narcotraficantes.
El primero es Arnoldo Villa Sánchez, señalado como jefe de seguridad de Héctor Beltrán Leyva, a quien el gobierno estadunidense incrimina en numerosos actos de violencia cometidos por órdenes de su patrón.
El director de la Oficina de Control y Bienes Extranjeros (OFAC), Adam Szubin, señaló que han estado vigilando al cártel de los Beltrán Leyva: “Hemos estado monitoreando de cerca el resurgimiento de la Organización de los Beltrán Leyva en su lucha por una mayor participación en el tráfico de drogas en México. Continuaremos usando nuestras dependencias para frenar estas organizaciones violentas”.
De acuerdo con un comunicado del Departamento del Tesoro, Villa Sánchez es el mayor accionista de Elite Sistemas de Seguridad Privada SA de CV, una empresa mexicana ubicada en Guadalajara y que tiene más de 150 empleados. Es dirigida por Miguel Loza Hernández, el otro señalado por el Departamento del Tesoro.
Esta dependencia ofrece una recompensa de 5 millones de dólares por información que conduzca a la captura de Héctor Beltrán Leyva y las autoridades mexicanas ofrecen hasta 2 millones de pesos.
En diciembre de 2009, la OFAC enlistó a Beltrán Leyva bajo la Ley Kingpin, que prohíbe realizar negocios con esta persona, y fue acusado de tráfico de drogas en los distritos Columbia y el Este de Nueva York.