Una red internacional de narcotráfico presuntamente transportaba cocaína desde Lima, Perú a la Ciudad de México, colocando las drogas en secreto dentro del equipaje de viajeros incautos, dijeron autoridades mexicanas.
La red de tráfico de drogas ha estado contrabandeando cocaína del aeropuerto de Lima, Perú, al Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México, señalaron los oficiales.El caso está siendo investigado por la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) de la Procuraduría General de la República (PGR), en cooperación con las autoridades peruanas.
Un viaje a Argentina
Eduardo de la Torre Carbajal, un contador público que vive en la Ciudad de México, es una de las presuntas víctimas de la red de tráfico de drogas. Las fuerzas de seguridad mexicanas lo detuvieron en el Aeropuerto Internacional Benito Juárez el 2 de noviembre de 2013, después de que las autoridades supuestamente encontraron 27 kilos de base de cocaína dentro de una de sus maletas.
El contador público mexicano no sospechó llegar a tener alguna dificultad cuando él y su novia volaron a Argentina el 25 de octubre de 2013, para unas vacaciones.
Vacaciones se convierten en pesadilla
La pareja regresó a la Ciudad de México el 2 de noviembre, en la aerolínea chilena LAN. El vuelo hizo una escala en Lima antes de continuar hacia la Ciudad de México.
El contador y su novia llegaron al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México el 2 de noviembre, el día en que comenzó su pesadilla.
Después de descender del avión, de la Torre Carbajal fue al carrusel para recoger su equipaje, pero sus maletas no aparecieron en la cinta transportadora.
De la Torre Carbajal preguntó por su equipaje a un oficial del aeropuerto. El oficial le dijo que fuera a la sección de Aduana para reclamar su equipaje. Fue a la oficina de la Aduana y las cosas empezaron a salir mal a partir de ese momento, comentó.
“Me llevaron a la oficina del procurador, donde firmé una autorización para que abrieran mis maletas. En una de las maletas con una etiqueta que aparentemente era mía, los agentes federales encontraron más de 24 kilos de cocaína,” dijo de la Torre Carbajal.
Enojo, miedo y un arresto
Al principio, reaccioné con enojo, dijo de la Torre Carbajal. Después empecé a sentir miedo porque no estaba seguro de lo que estaba pasando y sabía que el tráfico de drogas se castiga duramente.
El contador explicó a los agentes de seguridad que alguien debió haber puesto la cocaína dentro de su maleta, comentó en una entrevista.
Después de que los agentes de la Aduana terminaron su búsqueda en sus maletas, los agentes de la Policía Federal (PF) me arrestaron, dijo de la Torre. Los agentes de la PF fueron profesionales, señaló.
“Los agentes de la Policía Federal fueron los que me dijeron (que estaba bajo arresto)”, dijo de la Torre Carbajal. “Me leyeron mis derechos y me llevaron con el procurador federal. Realmente me trataron con mucha amabilidad y calma.”
Después de pasar 36 horas en detención y hacer una declaración con el procurador federal, un juez liberó a de la Torre bajo palabra. El caso continua en investigación.
Los viajeros deben ser cautelosos ante la posibilidad de que los operarios del crimen organizado escondan drogas en su equipaje, dijo de la Torre.
¿Escondieron los narcotraficantes cocaína dentro de la maleta de una maestra?
En julio de 2013, tres meses antes de que los agentes de seguridad encontraran cocaína dentro de una de las maletas perteneciente a de la Torre Carbajal, las autoridades del aeropuerto encontraron drogas en el equipaje de una maestra de preescolar.
La maestra, Ángel de María Soto Zárate, del estado de Veracruz, viajó a Brasil para asistir a las celebraciones del Día Mundial de la Juventud, del 23 al 28 de julio del 2013.
El vuelo de regreso de Soto Zárate, a finales de julio, hizo una escala en Lima, Perú. En el aeropuerto de la Ciudad de México, la maestra de escuela fue al carrusel de equipaje para recoger sus maletas. Pero no aparecieron.
Un grupo de agentes de la PF pidieron a Soto Zárate, de 23 años, que los acompañara. Los agentes de seguridad la llevaron a una habitación, en donde abrieron una de sus maletas para mostrarle que contenía 10 kilos de cocaína.
Las autoridades acusaron de tráfico de drogas a la joven maestra y ella pasó por un breve encarcelamiento. Gracias a una investigación realizada por la PF y a los esfuerzos de sus abogados defensores, las autoridades despejaron de Soto Zárate cualquier implicación en el tráfico de drogas. Los fiscales retiraron los cargos y la maestra fue liberada de prisión.
La región andina es un importante productor de cocaína
Por décadas, los narcotraficantes han encontrado la manera de transportar cocaína desde la región andina, que incluye a Perú, Colombia y Bolivia, hacia México y los Estados Unidos.
Perú es el principal productor de la hoja de coca –la materia prima necesaria para producir cocaína– en la región, según Ricardo Soberón Garrido, director del Centro de Investigación sobre Drogas y Derechos Humanos (CIDDH) en Perú.
“Tenemos identificadas 59,000 hectáreas en donde actualmente se produce la hoja de coca. Ésta podría ser posiblemente trasladada para la producción de hasta 300 toneladas métricas de clorhidrato de cocaína”, dijo Soberón Garrido.
Rutas de embarque de cocaína
Los traficantes de drogas dependen en gran medida de tres rutas principales para la transportación de cocaína fuera de los Andes: por mar y aire a México, de donde las drogas son transportadas a los Estados Unidos; a través de Colombia y el Mar Caribe, donde la cocaína usualmente es transportada en bote o aeroplano a los EE. UU.; y a través de Brasil, donde las drogas generalmente son transportadas en botes y aviones a Europa y África Occidental, según Soberón.
Las organizaciones delictivas transnacionales, como el Cártel de Sinaloa, que es liderado por Joaquín “El Chapo” Guzmán, utilizan más las rutas marítimas en embarcaciones de pesca que las rutas aéreas en aviones, dijo Soberón Garrido.
“La ruta marítima sigue siendo el método principal para transportar grandes cantidades de cocaína. Los aeropuertos son más usados por las organizaciones delictivas como una forma de distribuir los envíos y provocar distracciones”, comentó Soberón Garrido.
¿Cuál es la mejor manera para lograr detener el narcotráfico en los vuelos comerciales?
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