Con música de banda y pancartas, más de mil 800 jóvenes, de aspecto estudiantes, mujeres y niños vestidos de blanco desfilaron en las ciudades de Culiacán y Guamúchil para demandar que Joaquín Guzmán Loera no sea extraditado a Estados Unidos y goce de un juicio justo.
Desde muy temprano, en las ciudades de Culiacán, Guamúchil y Mocorito a través de las redes sociales y en cartulinas pegadas en paredes, se invitó a la ciudadanía a asistir a las marchas para exigir la liberación de 'El Chapo' Guzmán.
En la capital del estado, a los pies de las escalinatas del templo de la Lomita, donde inició el desfile por la avenida Álvaro Obregón, jóvenes no identificados distribuyeron camisetas, gorras, tamales y agua envasada entre los asistentes.
Vistiendo playeras con la leyenda: “We Love Chapo”, jovencitas que dijeron estudiar bachillerato justificaron su presencia en el desfile que culminó frente al atrio de catedral y que se convirtió en un baile popular con bandas de música, de la siguiente manera: “Joaquín Guzmán nos ayudó con despensas a mucha gente en el desastre que dejó a su paso el huracán Manuel”.
Entre las pancartas que portaban en su inmensa mayoría mujeres, se podía leer: “Liberen al señor Chapo Guzmán”; “Sinaloa quiere libre al Chapo” y “Chapo Culiacán está contigo”, entre otras.
Doña Teresa, casi al frente del contingente, con una pancarta en brazos, afirmó que asistió por voluntad propia, puesto que ella conoce por voces de sus vecinos de una de las colonias periféricas de la ciudad de la bondad del personaje.
“Nadie nos organizó, ni nos pagó para asistir a esta marcha”, fueron las respuestas vertidas.
La marcha en la capital del estado, que concentró a cerca de mil participantes, los cuales caminaron al ritmo de la música de la banda, tuvo una duración de sólo 45 minutos en su trayecto del templo de la Lomita al Palacio Municipal.
Al culminar la movilización, jóvenes que tomaron la plazuela del centro como pista de baile con tambora y la avenida para jugar arrancones, fueron desalojados con gases lacrimógenos por elementos de la Policía Municipal.
Según el primer reporte preliminar de la corporación, 12 jóvenes que consumían cerveza y festejaban las carreras de autos frente al atrio de Catedral fueron detenidos y remitidos a la barandilla.
Por la noche, el gobierno de Sinaloa emitió un comunicado en el que rechazó toda manifestación social que vaya en contra de las acciones de la ley.
“El Estado respeta la libre manifestación de las ideas siempre y cuando éstas no impliquen la comisión de un delito, la afectación de terceros, y el aval de conductas antisociales y fuera de la ley”.
Además, hizo un llamado “a los hombres y mujeres de Sinaloa para que ponderen los valores morales, éticos y cívicos que nos distinguen como gente de trabajo, con capacidad, y un potencial de desarrollo para aportar a México lo mejor de nosotros mismos”.