La presencia del Cártel de Sinaloa encabezado por Joaquín Guzmán, mejor conocido como El Chapo Guzmán, se extendía a cerca de 50 países hasta el momento de su detención, entre ellos, España, Italia, Portugal, Francia, Argentina, Polonia, Malasia, Holanda, China, India, Japón, República Checa y Australia.
A la muerte de Osama Bin Laden, El Chapo se convirtió en el hombre más buscado en el mundo; dejando de ser un campesino para convertirse en uno de los hombres más ricos y poderosos del mundo según la revista Forbes, que asegura que su patrimonio es de 3 mil millones de dólares.
Fundador del cártel del Pacífico en 1989, El Chapo Guzmán es responsable del entre el 40 y el 60 por ciento de la droga que entra a Estados Unidos de acuerdo con una investigación realizada por el diario New York Times, mientras que a decir del presidente del Instituto de Acción Ciudadana y ex asesor de la ONU, Edgardo Buscaglia, conforme a unidades de investigaciones patrimoniales de la Unión Europea, Canadá y Estados Unidos, el cártel del Golfo opera en 48 países y se encuentra “en franca expansión”.
La mayoría de la droga traficada por El Chapo provenía de Colombia y Ecuador, la cual era transportada por vía terrestre, marítima o aérea tanto a México como a Nigeria, Sierra Leona o Sudán para a su vez, ser enviada en los últimos dos casos, a Italia.
A pesar de la detención del Chapo Guzmán, la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés) señaló que “su organización sigue operando, pero poco a poco será desmantelada como ha ocurrido con otros cárteles de la droga en México”.
Sin embargo, el costo de las drogas comercializadas por el cártel de Sinaloa han permitido que su mercado continúe en expansión, puesto que a decir de Guillermo Galdós, autor del documental La Leyenda del Chapo, “en la zona cocalera de Perú o Colombia, un kilo de coca se consigue en 2 mil dólares, pero una vez en Estados Unidos, el precio de la droga sube a 35 mil dólares en California, mientras que en Chicago o Nueva York el precio del kilo es de 45 mil dólares”.
El precio de la cocaína aumenta si se trata de su venta en Europa y Asia, donde puede llegar a costar 65 mil dólares el kilogramo, lugares donde El Chapo Guzmán ha logrado llegar gracias a la relación que éste ha mantenido con grupos criminales como la Cosa Nostra y la Ndrangheta en Italia, las mafias chinas Sun Yee On, 14 k y Tai Huen Tsai en China o los Hermanos Cifuentes y el grupo de Oliver Solarte –ambos nexos con las FARC- en Colombia.
Para el jefe regional de la Oficina Antidrogas de Naciones Unidas, Antonio Luigi Mazzitelli, la detención de El Chapo generará inestabilidad y reconfiguración en los mercados internacionales de la droga.
“Lo que es cierto es que seguramente El Chapo Guzmán y el cártel del Pacífico representan un gran actor en esos mercados […] entonces al debilitarlos seguramente generará inestabilidad”, declaró.
En diciembre del 2013, autoridades filipinas detuvieron a tres sospechosos en Manila con 84 kilogramos de metanfetaminas. Más tarde se daría a conocer, tenían vínculos con el cártel de Sinaloa, y para lograr el producto final, los precursores químicos fueron proporcionados por las bandas chinas 14K y Sun Yee On.
El gran consumo de drogas en el mundo -60 mil millones de dólares según la ONU- requieren un gran aparato de lavado de dinero como en el caso Wachovia Corp que en el año 2012 admitió no haber vigilado ni informado sobre actividades sospechosas de lavado de dinero permitiendo transferencias de millones de dólares en fondos ilícitos provenientes del narcotráfico mexicano que habrían permitido la compra de al menos cuatro aviones para transportar un total de 22 toneladas de cocaína.
Wachovia admitió que no haber hecho lo suficiente para detectar fondos de más de 378.4 mil millones de dólares en sus negocios con casas de cambio mexicanas entre 2004 y 2007.
Art Bilek, vicepresidente ejecutivo de la Comisión de Crimen de Chicago, quien nombró a El Chapo como su enemigo público número uno –etiqueta sólo antes usada para describir a Al Capone-, señaló que las actividades del cártel de Sinaloa han sido un factor detrás de la violencia de Chicago donde se registraron en el 2012, 500 homicidios.
Sin embargo, el arresto de Joaquín Guzmán no significa el cese de las actividades delictivas del cártel de Sinaloa. “No sabemos cuál es su potencial de poder bajo custodia”, declaró Bilek.