Sinaloa.- Considerado un sicario sanguinario que solía usar armas de alto poder, Gonzalo Inzunza Inzunza, alias “El Macho Prieto”, trastocó la vida de los sinaloenses, sobre todo en 2008.
El sicario, abatido el miércoles en Sonora, en abril de ese año inició, junto con Manuel Torres Félix, la llamada narcoguerra entre el Cártel de Sinaloa y los hermanos Beltrán Leyva.
Los cruentos enfrentamientos registrados a partir del 30 de abril y durante los primeros días de mayo fueron atribuidos a los dos narcotraficantes por la Secretaría de Seguridad Pública Federal.
A ambos los señalaban como responsables de la ola de violencia que generó sicosis entre los ciudadanos, con las muertes de decenas de policías y civiles en la entidad.
Nacido en Culiacán el 17 de agosto de 1971 y habitante de la Colonia Morelos, según el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, “El Macho Prieto”, también conocido como “El MP” o “El Once”, se caracterizaba por usar armas de alto poder, desde fusiles Barret calibre .50, hasta granadas y bazucas, las cuales usaba para asesinar civiles o emboscar policías.
“Me presento con balazos, con granadas y bazucas, me apodan el Macho Prieto”, dice el corrido denominado “Me apodan El Macho Prieto”.
“El Macho Prieto”, señalado como jefe de sicarios de Ismael “El Mayo” Zambada, estuvo en Sinaloa hasta 2010, cuando fue enviado a Mexicali como jefe de las células que operan en Baja California y Sonora. Desde esa ciudad controlaba el tráfico de drogas hacia Estados Unidos, por parte del Cártel de Sinaloa.
En 2012 en Mexicali se desató una ola de violencia atribuida por las autoridades de Baja California a Inzunza Inzunza, en una disputa por el territorio con la célula de “Los Garibay”.
“Los Garibay”, liderados por José Manuel Garibay, también operaban para el Cártel de Sinaloa, pero en ese año supuestamente intentaba adherirse al Cártel de Jalisco y se inició una pugna interna entre los dos grupos.
Desde septiembre de 2011, la Procuraduría General de la República ofrece una recompensa de 3 millones de pesos para quien proporcionara información que condujera a la captura de “El MP”.
En mayo pasado la DEA dio a conocer la identidad de ocho jefes de plaza que operan en el corredor Sonora-Arizona, bajo las órdenes de Inzunza Inzunza.
A través de ellos, el Cártel de Sinaloa operaba el trasiego de drogas hacia Estados Unidos utilizando la ciudades de Tucson y Phoenix como centro de almacenamiento y distribución.
El capo fue abatido el miércoles, junto con otros pistoleros, en un enfrentamiento contra elementos de la Marina en Puerto Peñasco, Sonora.